Cheesecake de naranja (sin horno).
Hoy os presentamos un postre fresco, suave, delicioso, apto para celíacos y lo mejor, no necesita horno para hacerlo.
Como sabéis, en Supernaranjas apostamos por apoyar el cultivo tradicional y sostenible, de ahí que nuestros postres cuenten siempre, con el mejor ingrediente de nuestra tierra, la naranja.
Pasamos a describir los ingredientes y cantidades para preparar este delicioso postre, con un molde de 15cm de diametro sin fondo.
Gelatina Cheesecake
200gr. de zumo (3 naranjas). 200gr. de crema de queso (Mascarpone o Philadelpia).
20gr. de azucar. 40gr. de azucar.
20gr. de agua fria. 50gr. de yogurt natural.
5gr. de gelatina en polvo. 10gr. de gelatina en polvo.
2 naranjas en almibar en lonchas.
200ml nata para montar.
Ralladura de una naranja
Prepararemos primero el molde, para poder montar la tarta. Sujetaremos con una o varias gomas, un papel film en el fondo del molde, tal y como se ve en la fotografía.
Pondremos a hidratar la gelatina en una taza con agua templada, durante unos minutos, mientras cortaremos por la mitad varias lonchas de las naranjas en almibar, y las iremos metiendo en el fondo del molde sobre el papel film, y rodeando las paredes, dejando una loncha entera para el centro.
Ahora prepararemos la gelatina con el zumo de naranja, para lo cual pondremos en un bol el zumo de tres naranjas recién exprimidas, a las que añadiremos 20gr. de azúcar. Lo pondremos en un cazo y llevaremos a ebullición, momento en el que apagaremos el fuego y añadiremos la gelatina escurrida. Moveremos para que se integre perfectamente en la mezcla y dejaremos atemperar. Una vez templada, pondremos varias cucharadas de esta gelatina en el molde, hasta cubrir a ras las naranjas que hay en el interior, cubriendo todos los huecos. El resto de la mezcla lo reservamos. Tenemos que mantener esta mezcla templada, a fin de que no gelatinice antes de volver a utilizar. Pondremos el molde a la nevera una media hora.
Mientras se enfría la gelatina del molde en el interior del refrigerador, prepararemos el cheesecake.
Primero prepararemos la gelatina. En dos tacitas con agua templada, pondremos 5gr. de gelatina en cada una y las dejaremos que vayan hidratando.
En otro bol más grande mezclaremos la crema de queso y el azúcar, hasta que éste se haya integrado perfectamente. Ahora pondremos los 50gr de yogurt y lo mezclaremos también. A continuación integraremos la nata y volveremos a mezclar sin batir. Si queremos una masa mas esponjosa, podemos batir la nata.
Esta masa la dividiremos en dos partes iguales. A una de ellas le añadiremos la gelatina que teníamos hidratando en una de las tacitas, removeremos hasta que se deslea y la pondremos en el molde que está en la nevera, que si han pasado los 30 minutos estará suficientemente gelatinizada.
Meteremos nuevamente en el refrigerador unos 30 minutos en espera de que el frío endurezca la mezcla. Mientras nos ocuparemos de mantener templada la gelatina del zumo, que teníamos reservada. Pasada la media hora de nevera, sacaremos el molde y derramaremos en su interior la totalidad del zumo de naranja, con la gelatina que teníamos reservada desde el principio.
Volveremos a meter en el refrigerador, y mientras prepararemos el resto del cheescake, al que le pondremos la gelatina que teníamos en la segunda tacita. Mezclaremos con precaución de que se integre bien y reservaremos para que cuando haya transcurrido la media hora de nevera, sacar el molde y terminar la tarta, introduciendo la mezcla en el molde y llevando por última vez al frigo.
Conviene tener un par de horas en la nevera toda la tarta, para asegurarnos que toda ella ha cuajado perfectamente. Una vez llega la hora de servir, se le da la vuelta al molde sobre la bandeja donde tengamos que servirla. Se quita el papel film y se quedará la naranja a la parte de arriba.
Esperamos que podáis hacerla, nosotros la hemos probado y es realmente ES-PEC-TA-CU-LAR.
